NUEVA YORK.- La ciudad de Nueva York está enfrentando grandes dificultades para combatir la proliferación de tiendas ilegales de cannabis, que han aumentado considerablemente desde la legalización de la droga en 2021. En una audiencia reciente de la Alcaldía, el sheriff de la ciudad, Anthony Miranda, expresó su intención de contratar más personal, debido a que su oficina actualmente tiene una vacante del 40%, lo que obstaculiza las operaciones contra las miles de tiendas sin licencia que operan en la ciudad.
Miranda explicó que, aunque se cuenta con un presupuesto para contratar 224 empleados este año, la falta de personal, en particular de ayudantes del sheriff, quienes llevan a cabo las redadas en los locales ilegales, está afectando los esfuerzos de control. Para octubre, se espera la incorporación de 90 nuevos empleados, lo que representará la mayor contratación en la historia de este departamento. Sin embargo, Miranda solicitó más fondos para ampliar la plantilla.
En mayo, la ciudad implementó la “Operation Padlock to Protect” (operación candado para proteger), la cual permite a las autoridades locales cerrar tiendas de cannabis sin licencia después de una primera inspección, sin necesidad de una orden judicial. Desde entonces, se han clausurado más de 1.100 tiendas. Sin embargo, el concejal Gale Brewer informó que aún quedan alrededor de 2.600 locales ilegales operando en la ciudad, una situación atribuida en parte al elevado costo de las licencias y a las demoras en la aprobación de permisos por parte del gobierno estatal.
A pesar de que 180 funcionarios están autorizados para cerrar estos establecimientos, incluyendo 30 que provienen de la oficina del sheriff, la falta de personal sigue siendo un problema. Esta escasez podría estar relacionada con la dimisión de numerosos empleados que, según la Asociación de Ayudantes del Sheriff, han renunciado debido a lo que describen como un comportamiento “muy irrespetuoso” por parte de Miranda.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com
