El presidente del Instituto Duartiano, Wilson Gómez Ramírez, llamó hoy al Gobierno a ser precavido y “tratar con cautela, neutralidad e inteligencia” sus relaciones con las fuerzas extranjeras que llegaron a Haití para enfrentar las bandas que controlan parte de ese país.
“Eso hay que verlo muy bien, cuando se trata de esas intervenciones, de esos acompañamientos”, manifestó, en referencia al anuncio del ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, de que República Dominicana dará asistencia médica a los policías de Kenia que llegaron a Haití.
“La asistencia médica es humanitaria. Eso es innegable, pero considero que, en este caso, se trata de fuerzas militares que van a confrontar grupos armados y que es previsible que llegarán a Haití con personal médico de capacitado y con la experiencia para tratar esos casos. Recordó que, en 1965, República Dominicana fue invadida por tropas norteamericanas que llegaron con el pretexto de ‘salvar vidas’ y lo que hicieron fue ultrajar al pueblo”, señaló.
El canciller Álvarez dijo ayer ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que República Dominicana colaborará con la Misión de Apoyo a la Seguridad en Haití, ofreciendo asistencia médica al personal de esa fuerza multinacional.
Aniversario Sánchez
Gómez Ramírez habló en el Altar de la Patria, donde el Instituto Duartiano depositó una ofrenda floral para conmemorar el 163 aniversario del fallecimiento del patricio Francisco del Rosario Sánchez.
Estuvo acompañado de los principales directivos y colaboradores de la institución que preside, entre ellos, Leni Sirí, Junior Torres, Julio Manuel Rodríguez Grullón y José Pilia Moreno Duarte.
Gómez Ramírez calificó de “delicada” la situación de violencia que vive Hatí. “Se prevé una confrontación armada y nuestro país tiene que mandar señales inequívocas de neutralidad y de distancia en lo que concierne a esa situación”, manifestó.
Dijo que las autoridades dominicanas deben limitarse a mandar señales de neutralidad “guardando distancia para no comprometerse”.
Virtudes de Sánchez
En el Altar de la Patria, los directivos y colaboradores del Instituto Duartiano resaltaron las virtudes y el sentido de responsabilidad de Sánchez.
Calificaron de “brutal” el asesinato del prócer, el 4 de julio de 1861, en San Juan, junto a un grupo de compañeros que luchaban por restaurar la independencia nacional, mancillada por el dictador Pedro Santana al anexar el país a España.
Los duartianos elogiaron la valentía de Sánchez y su compromiso con los principios de la Trinitaria, que permitieron alcanzar la independencia nacional, proclamada el 27 de febrero de 1844.
«Francisco Sánchez fue un destacado discípulo de Juan Pablo Duarte que consagró su vida para conquistar y mantener las libertades y la soberanía del pueblo dominicano», manifestó Gómez Ramírez en un discurso.
Recordó que, junto a Sánchez, fueron asesinados patriotas como Juan Erazo, Benigno del Castillo, Félix Mota y Gabino Simonó.
Pilar Moreno
