Un trágico episodio de violencia armada en Nueva York ha dejado a una niña de 5 años huérfana, tras la muerte de su padre, Alí Flores, un rapero emergente conocido como “1185 Juice”. El incidente ocurrió en el complejo de viviendas públicas “Saint Mary’s Park Houses” en El Bronx el 16 de octubre. Flores, de 26 años, fue baleado en el pecho en el pasillo de un edificio que estaba visitando, en un aparente robo.
Dos sospechosos, uno de ellos un adolescente de 15 años, fueron detenidos al día siguiente. Según las autoridades, el menor fue el responsable de disparar el tiro mortal, mientras que Francisco Deleon, de 23 años, también fue arrestado. Ambos enfrentan cargos de homicidio. Flores fue encontrado con dinero en efectivo esparcido a su alrededor y se reportó que los asaltantes le robaron una pequeña cantidad de marihuana. El joven rapero, que vivía en Harlem con su hija, intentaba rehacer su vida tras haber salido de prisión en 2021.
Con la pérdida de su único tutor, su hija probablemente será trasladada a Carolina del Norte para vivir con su abuela, según comentó Norman Flores, hermano de la víctima. La violencia armada sigue siendo una preocupación creciente en Nueva York, afectando a personas inocentes, mientras las pandillas continúan disputando territorio. Este trágico hecho es otro doloroso recordatorio del impacto devastador de esta violencia.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com
