El Papa Francisco, quien recientemente se recuperó de una grave neumonía que puso en peligro su vida, ha anunciado que dará su tradicional bendición «urbi et orbi» en la Plaza de San Pedro el Domingo de Pascua, el 20 de abril. Esta bendición, que significa «a la ciudad y al mundo», es un momento crucial para los católicos, ya que el Papa imparte su bendición a Roma y al resto del mundo.
Detalles: Después de cinco semanas de hospitalización en Roma, el Papa Francisco regresó al Vaticano el pasado domingo para continuar su recuperación, la cual incluye terapias de rehabilitación motriz y respiratoria. Su salud sigue siendo motivo de preocupación entre los fieles, quienes esperan ansiosos su presencia en las celebraciones pascuales.
Contexto: La bendición «urbi et orbi» es una tradición que solo el Papa puede llevar a cabo. Aunque la Santa Sede no ha confirmado si el Papa presidirá otras celebraciones durante la Semana Santa, su presencia en la bendición de Pascua es un símbolo de esperanza y resiliencia para los católicos en todo el mundo. La decisión sobre su participación en otras ceremonias dependerá de la evolución de su salud en las próximas semanas.
