El Papa Francisco ha compartido su mensaje para la Cuaresma 2025, invitando a los fieles a «caminar juntos en la esperanza». La Cuaresma, que se extenderá del 5 de marzo al 17 de abril, se centrará en tres dimensiones clave: peregrinación, sinodalidad y esperanza.
Peregrinación Espiritual
La Cuaresma comenzará con el rito penitencial de las cenizas, un recordatorio del viaje espiritual al que todos los creyentes están llamados. «Este es un viaje de fe y esperanza, enriquecido por la gracia del Jubileo», subrayó Francisco, instando a reconocer las oportunidades de conversión que nos ofrece la misericordia divina.
Invitación a la Sinodalidad
El Papa evoca el lema del Jubileo, «Peregrinos de esperanza», aludiendo al histórico viaje del pueblo de Israel hacia la tierra prometida. Este simbolismo resalta nuestra condición humana como peregrinos en este mundo y nos anima a liberarnos de las cadenas del pecado y la falta de dignidad.
Conversión y Colaboración
Francisco enfatiza que la esencia de la Iglesia radica en el caminar juntos. En su mensaje, exhorta a abrir los corazones al Espíritu Santo para fortalecer la capacidad de escucha y colaboración. La conversión hacia una sinodalidad auténtica es un llamado a superar el egoísmo y fomentar un trabajo conjunto en comunidad.
Esperanza Renovada
El Santo Padre invita a todos a vivir este camino con una esperanza renovada. «La esperanza que no defrauda» debe guiarnos hacia la victoria pascual. Francisco desafía a los fieles a confiar en Dios y en su promesa de vida eterna como fundamento para las decisiones diarias.
Reflexión y Descanso
El Papa desea que cada creyente encuentre en este mensaje cuaresmal un motivo para descansar en la esperanza y el amor divino. «Espero que cada uno pueda llevar consigo la luz de la fe en sus corazones, permitiendo que ese amor nos acompañe incluso en los momentos de descanso y reflexión», concluyó el Santo Padre.