Ryan Cato ha sido hallado culpable del asesinato de su hijastro Ayden Wolfe, de 10 años, quien sufrió maltratos en su hogar en Harlem, Manhattan. La madre del niño, Aquisha Johnson, también participó en algunos de los abusos.
El miércoles, un jurado de la Corte Suprema de Manhattan declaró a Cato culpable de homicidio y de poner en peligro el bienestar de un menor. Ayden murió el 6 de marzo de 2021 tras ser llevado al hospital desde su residencia en St. Nicholas Houses.
Los paramédicos encontraron al niño con heridas graves y empapado, en un intento desesperado por reanimarlo. Fue trasladado al Hospital Harlem, donde falleció horas después. La autopsia reveló lesiones severas en órganos internos y hematomas, según los registros judiciales. La causa de la muerte fue «síndrome del niño maltratado».
Johnson ya había admitido su culpabilidad por homicidio involuntario y negligencia criminal, cooperando en el juicio contra Cato. Durante el proceso, se reveló que Ayden sufrió abusos continuos mientras asistía a la escuela de forma remota debido a la pandemia de COVID-19.
Johnson confesó haber participado en el maltrato, golpeando al niño con un cinturón y obligándolo a sostener pesas como castigo. Describió cómo Cato golpeaba al niño con una fuerza desmedida, comparable a la que usaría en una pelea con un adulto.
El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, declaró: «Ryan Cato torturó a Ayden Wolfe durante meses antes de golpearlo hasta matarlo en un período de 24 horas de horror indescriptible». Las pruebas presentadas mostraron la brutalidad del crimen, con lesiones internas y externas extensas.
La defensa de Cato planea apelar, intentando culpar a Johnson, pero los fiscales argumentaron que ella no pudo haber sido la principal agresora. Durante el juicio, se mostraron fotos de la autopsia y se escucharon llamadas al 911 donde se oía a Ayden retorciéndose de dolor.
La violencia doméstica sigue siendo un problema grave en Nueva York, con un promedio de 747 incidentes reportados diariamente, incluyendo agresiones y abusos verbales. En casos recientes, un abuelo fue sentenciado por abusar de su nieta y un bebé murió por desnutrición severa.
Si sospecha de maltrato, llame al 911 o al (800)-942-6906, o envíe un mensaje de texto con «WELL» al 65173.
