Los migrantes tienen la intención de dejar la cruz justo donde se encuentra el muro con el alambre de púas en donde muchos se han herido o hasta han muerto en su deseo de llegar a EE.UU.
Migrantes que se encuentran varados en la frontera sur entre Texas y México, harán un viacrucis este Viernes Santo. Las personas clavarán una cruz en el cerco de púas que colocó el Gobierno de Texas en el río Bravo o Grande, donde la barrera ha provocado lesiones y hasta la muerte a quienes intentan cruzar.
Los extranjeros se reunirán a las 10:00 hora local, frente al punto 36 de la frontera de Ciudad Juárez con El Paso, Texas, donde migrantes se concentran en espera de cruzar a Estados Unidos.
El recorrido iniciará en la última avenida que los migrantes cruzan antes de llegar a Estados Unidos, desde donde caminarán por turnos con la cruz a cuestas hasta llegar al río Bravo, frente a la puerta del muro.
La cruz son las cargas que llevan en los hombros
Carlos Mayorga, coordinador del Colectivo Ángeles Mensajeros, dijo a EFE que la cruz representa las cargas que llevan en sus hombros estos viajeros.
“Los migrantes cargarán esta cruz, que no es otra cosa más que la representación del peso de las autoridades mexicanas y centroamericanas que han abusado de ellos durante el camino, el peso de la indiferencia del Gobierno de Estados Unidos, el peso de la apatía e inhumanidad del gobernador de Texas, Greg Abbott”, comentó Mayorga.
Agregó que levantarán la cruz y la dejarán ahí encajada en la barricada de alambre de púas que el gobernador Abbott colocó el año pasado, y se niega a quitar, pese a un fallo de la Suprema Corte de Estados Unidos.
“Lo único que buscan es paz”
El Gobierno de México ha denunciado que esto aumenta el riesgo de que migrantes se lastimen o mueran al cruzar, como ocurrió el 14 de enero con una mujer mexicana y sus dos hijos que se ahogaron en Piedras Negras.
“Al momento de dejarle la cruz ahí frente a Estados Unidos, queremos mandar un mensaje de misericordia para todas estas familias humildes que lo único que buscan es paz”, indicó el activista.
Mayorga dijo que ahora hay alrededor de 400 migrantes arman lugares para dormir con cobijas para pernoctar junto al río Bravo del lado estadounidense con la esperanza de cruzar la barrera.
Migrantes le temen a agentes de INM
Anexó que no regresan al lado mexicano porque le temen a los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), quienes “los han venido atormentando durante todo el camino como los verdugos lo hicieron con Jesús”.
La escena ocurrirá en medio del flujo migratorio inédito en la región, donde México reportó una alza de cerca del 77% en la migración irregular en 2023, con más de 782,000 extranjeros indocumentados detectados.
Además, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) declaró en septiembre pasado a la frontera entre México y Estados Unidos como “la ruta migratoria terrestre más peligrosa del mundo”, con más de 686 migrantes fallecidos o desaparecidos en 2022.
Por EFE
