Confesión y decomiso
Cinco miembros de la familia Lucchese, incluido Anthony Villani, se declararon culpables de dirigir una operación de apuestas ilegales que generaba millones en ganancias ilícitas. Villani, quien aceptó pagar $4 millones en decomiso, lideraba Rhino Sports, una plataforma que operaba en El Bronx y el condado de Westchester.
Impacto de la red
Según los fiscales, la operación aceptaba apuestas de cientos de personas semanalmente y recaudaba más de un millón de dólares anualmente. Además, empleaba a figuras de la mafia como corredores de apuestas para garantizar el cobro de las ganancias.
Mensaje de las autoridades
El fiscal John Durham enfatizó que estas operaciones no solo promueven el crimen organizado, sino que también perpetúan la violencia entre facciones rivales. Los acusados ahora enfrentan severas penas de prisión, marcando el fin de una era para esta red ilegal.