domingo 24 de noviembre de 2024 21:07 pm
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El experto en informática habló de lo que hizo para frustrar un intento de ciberataque.

Los intentos de hurto por mensajería se han vuelto muy comunes en el reciente tiempo y, a pesar de que haya múltiples maneras de evitar ser engañado mediante este tipo de aplicaciones, lo cierto es que los ciberdelincuentes encuentran formas más novedosas de tratar de estafar a personas en la digitalidad.

WhatsApp, quizá la aplicación de mensajería más descargada a nivel mundial, no es ajena a este flagelo y es por ello que gran parte de los expertos en ciberseguridad enfocan sus saberes en aconsejar a usuario en esta ‘app’.

Uno de los casos más recientes tiene que ver con el ‘hacker ético’ Yorgo Amin, quien habló sobre cómo tuvo que lidiar con un intento de robo de la cuenta de WhatsApp de su padre, contando también qué fue lo que hizo para evitar ser hurtado.

El experto contó, citado por el medio mexicano ‘Expansión’ que su familiar lo llamó para decirle que ya no podía entrar a su cuenta de WhatApp luego de suministrar el código de acceso a esta aplicación, el cual se le envía al remitente que quiera ingresar a los chats.

El padre de Amin, según cuenta el experto, recibió un supuesto mensaje desde Amazon, pidiéndole un ‘código de seguridad’ para realizar el envío efectivo de un paquete. Cabe mencionar que es muy común que los delincuentes utilicen mensajes ya guionizados para sonar convincentes y poder persuadir a su víctima, según explicó la Policía Nacional.

“Me hablaron de Amazon y me dijeron que tenían que entregar un paquete, pero necesitaban un código. Yo estaba trabajando, muy estresado, y les di el número que me estaban pidiendo”, dijo el padre del experto, según relató. Fue en ese momento cuando se dio cuenta de que le habían hackeado el WhatsApp a su familiar.

¿Qué hizo?

Amin cuenta que su primera estrategia fue ganar tiempo. “Comencé a marcar directamente al WhatsApp, porque así se le bloqueaba la pantalla y no podía hacer nada hasta que contestara o yo colgara”. Luego de llamar tres veces seguidas sin parar, el hacker bloqueo a Yorgo, sin embargo, comenzó a llamar desde otros números. “Fue así como gané ocho valiosos minutos donde el ciberdelincuente no pudo hacer nada”, agregó, citado por ‘Expansión’.

Entre tanto, Yorgo aseguró que le pidió a siu familia lo siguiente: “saquen a mi papá de todos los grupos y avisen a todos que fue hackeado”. Explicó que es más importante sacarlo de los grupos porque así el mensaje puede ser difundido a más personas, pero el delincuente no se da cuenta de que ya lo descubrieron. Por otro lado, evita que obtenga información de otras personas.

“Nunca le deposites dinero a alguien si te lo pide por un mensaje en WhatsApp. Ni aunque sea tu mamá. Pídele que te mande una nota de voz o que te marque, pero escucha su voz, no te fíes de los mensajes”, sugirió.

Mientras tanto, en esos mismos minutos, Yorgo le pidió a su padre que llamara a sus bancos para que le desactivaran las tarjetas. “Le dije que las desactivara y no que las cancelara, porque los bancos tienen protocolos para hackeos y fraudes y pueden hacerlo de manera temporal y así te evitas el proceso tedioso de volver a abrir tus cuentas después”, mencionó.

Sin embargo, sabía que en el teléfono de su padre había mucha información crítica, tales como contraseñas: “Es tan fácil como poner en el buscador de WhatsApp ‘contraseña’ y muchas personas tienen guardadas sus contraseñas e información importante en la plataforma”.

Una forma de enviar este tipoi de información mediante WhatsApp es a través de las nuevas herramientas de la app, en la cual se puede hacer que una fotografía desaparezca luego de haberla abierto o activando los mensajes temporales.

El paso siguiente fue cambiar de manera inmediata las contraseñas del correo electrónico. “Ahí están todos sus negocios y si te hackean tu correo, es una pesadilla porque te pueden hackear todo lo demás”.

Contó que pudo saberlo porque la situación con Outlook es que al momento de acceder desde un nuevo dispositivo, se cierra la sesión en otro recién utilizado. Esto causó una competencia para ver quién lograba cambiar la contraseña primero, pues cada vez que uno accedía, el otro era desconectado.

“La carrera se volvió una cuestión de ver, literalmente, quién podía dar clic más rápido y quién tenía el mejor internet”. Contó que logró cambiarla con éxito; no obstante, reconoció que tuvo mucha suerte al estar en una computadora. “Creo que la ventaja es que yo estaba usando una computadora y él lo intentaba desde el celular, y una computadora siempre va a ser más rápida”.

JUAN MARTÍN MURILLO HERRERA

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