miércoles 18 de diciembre de 2024 09:10 am
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La ballena jorobada macho que realizó una de las migraciones más largas y poco comunes jamás registradas ha cautivado la atención de expertos y científicos por su travesía épica. En 2017, la ballena fue avistada en el océano Pacífico frente a la costa de Colombia, pero lo que hizo que este viaje fuera realmente excepcional es que, varios años después, en 2022, apareció en el océano Índico cerca de Zanzíbar, a una impresionante distancia de al menos 13,000 km.

Los científicos han planteado varias teorías sobre lo que podría haber motivado a esta ballena a emprender una migración tan inusual y distante. Una de las explicaciones más plausibles se refiere al cambio climático, que podría estar alterando las reservas de alimentos, como el krill, un crustáceo diminuto que forma parte de la dieta de las ballenas jorobadas. Se especula que el cambio en la disponibilidad de estos alimentos ha obligado a las ballenas a viajar distancias mucho más largas en busca de sustento.

Otra posible causa de esta migración extraordinaria podría ser el deseo de encontrar una nueva zona de reproducción. Los esfuerzos de conservación global han permitido que las poblaciones de ballenas se recuperen, lo que podría estar motivando a los cetáceos a explorar nuevas áreas para reproducirse y diversificar sus territorios. La recuperación de las poblaciones de ballenas en diferentes partes del mundo también podría estar incidiendo en este tipo de migraciones inusuales.

Ekaterina Kalashnikova, investigadora del Programa de Cetáceos de Tanzania, comentó que la hazaña de esta ballena era “realmente impresionante e inusual, incluso para esta especie que es conocida por su migración a gran escala”. En sus palabras, es muy probable que esta migración sea la más larga jamás registrada para una ballena jorobada, un tipo de cetáceo que ya es conocido por sus grandes migraciones anuales, nadando desde zonas de reproducción tropicales hasta aguas más frías, donde encuentran sus fuentes de alimento.

Sin embargo, lo que hace este caso aún más fascinante es que la ballena no solo atravesó grandes distancias, sino que lo hizo entre dos zonas completamente distantes, lo que refuerza la idea de que esta migración fue realmente excepcional.

Uno de los factores mencionados por los científicos es el cambio climático global, que está alterando la distribución de los ecosistemas marinos y la abundancia de los recursos alimenticios que las ballenas requieren. La alteración del krill, su principal fuente de sustento, podría estar forzando a las ballenas a explorar áreas más alejadas de lo que tradicionalmente recorrían. Además, los eventos climáticos extremos, que se están volviendo más frecuentes, también podrían estar influyendo en el comportamiento migratorio de estos cetáceos.

Por otro lado, el artículo también sugiere que la migración podría estar relacionada con los esfuerzos de conservación y con una posible recuperación de las poblaciones de ballenas jorobadas, lo que podría estar motivando a los cetáceos a explorar nuevas áreas tanto para la alimentación como para la reproducción. Kalashnikova afirmó que, aunque las razones exactas siguen siendo desconocidas, lo más probable es que la migración de esta ballena esté influenciada por una combinación de cambios en el clima, eventos ambientales extremos y posibles adaptaciones evolutivas de la especie.

El increíble viaje de esta ballena jorobada fue documentado por un grupo de investigadores que utilizaron fotografías de ballenas enviadas por observadores y ciudadanos a través del sitio web de ciencia ciudadana happywhale.com. Esta base de datos utiliza inteligencia artificial para identificar ballenas jorobadas según los patrones y formas individuales de sus colas y aletas, lo que ha permitido rastrear sus movimientos alrededor del mundo.

Este tipo de investigación resalta la importancia de la colaboración entre científicos y el público para obtener información crucial sobre el comportamiento y los movimientos de especies migratorias como la ballena jorobada. Sin duda, este hallazgo es solo el comienzo de un mayor entendimiento sobre cómo el cambio climático y otros factores están afectando la migración de estas criaturas marinas, cuyas rutas de viaje, aunque impresionantes, son cada vez más complejas y llenas de misterio.

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