Un juez de Nueva York ha fijado la fecha del 5 de mayo para el inicio del juicio contra el magnate del hip-hop, Sean “Diddy” Combs, quien enfrenta graves cargos de tráfico sexual. Combs compareció ante el juez Arun Subramanian en el tribunal federal de Manhattan, donde abrazó a sus abogados antes de la audiencia. Este juicio se desarrolla tras su arresto el pasado 16 de septiembre, cuando el fundador de Bad Boy Records fue acusado de conspiración para cometer crimen organizado y tráfico sexual, basándose en acusaciones que se remontan al 2008.
La acusación formal sostiene que Combs coaccionó y abusó de mujeres durante años, supuestamente con la ayuda de una red de asociados y empleados que participaron en actividades violentas para silenciar a las víctimas. Entre los actos denunciados se incluyen secuestros, palizas y hasta incendios provocados. Pese a las acusaciones, el artista de 54 años se ha declarado no culpable.
Los abogados defensores de Combs han intentado en varias ocasiones conseguir su libertad bajo fianza, pero hasta el momento han fracasado. Dos jueces han considerado que el magnate representa un peligro para la comunidad, lo que ha llevado a rechazar varias solicitudes de fianza, incluyendo una propuesta de $50 millones, que incluía arresto domiciliario y monitoreo electrónico. El argumento de los jueces es que Combs podría influir en los testigos y obstruir la investigación en curso.
En una reciente audiencia, los abogados de Combs apelaron ante el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito, solicitando que se revoquen las decisiones anteriores sobre la fianza. Según los defensores, el paquete propuesto es suficiente para evitar cualquier riesgo, argumentando que el tribunal de primera instancia se dejó influenciar por la “retórica exagerada” del gobierno.
Un punto clave en la defensa de Combs ha sido la filtración de un video del 2016, donde el artista aparece golpeando y pateando a su exnovia y protegida, la cantante Cassie, en un pasillo de un hotel. Este video fue emitido por CNN en mayo de este año, lo que, según los abogados del acusado, ha generado una cobertura mediática negativa que compromete el derecho de Combs a un juicio justo. El Departamento de Seguridad Nacional fue señalado por la defensa como responsable de la filtración. Sin embargo, los fiscales federales respondieron que el gobierno no estaba en posesión de ese video antes de que fuera difundido.
Este caso ha despertado gran interés mediático y promete ser uno de los juicios más destacados en la industria del entretenimiento en los próximos meses. Mientras se acerca la fecha del juicio, Combs sigue enfrentándose a graves acusaciones que podrían determinar el resto de su vida, tanto personal como profesionalmente.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com