La orden federal de eliminar el peaje para circular en Manhattan antes del 21 de marzo ha generado una disputa entre la administración de Trump y las autoridades locales de Nueva York. La MTA ha recaudado $48.6 millones en el primer mes del peaje, dinero esencial para proyectos de transporte. La gobernadora Kathy Hochul ha defendido el peaje, subrayando su importancia para el transporte público.
La batalla legal continúa mientras la MTA y la gobernación de Nueva York buscan mantener el cobro vigente, argumentando que es crucial para la ciudad.