Un Ejercicio Beneficioso para Pacientes con Enfermedades Reumáticas
La doctora Raquel Almodóvar, especialista en reumatología, ha destacado los beneficios de caminar para las personas que sufren enfermedades reumáticas. Según la experta, caminar puede marcar la diferencia en la salud de estos pacientes, ya que mejora su condición física, mental y social.
Beneficios Físicos y Mentales
«Un pequeño gesto como caminar puede marcar la diferencia en la salud de las personas con enfermedades reumáticas», ha indicado la doctora Almodóvar. Caminar regularmente ayuda a aliviar el dolor, la fatiga y la rigidez, mejorando la movilidad y la calidad de vida de los pacientes. Además, el ejercicio físico contribuye a reducir el estrés y la ansiedad, mejorando el estado de ánimo y la salud mental.
Reducción del Sedentarismo
La especialista ha recalcado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar ejercicio físico para reducir el sedentarismo, reconociendo que las personas que caminan con regularidad obtienen mejores resultados en términos de salud en comparación con aquellas que llevan una vida sedentaria. El objetivo ideal, que permite alcanzar la mayoría de los efectos beneficiosos, se sitúa en unos 10.000 pasos diarios en personas menores de 60 años, y en torno a 8.000 en mayores de 60 años.
Ejercicio Accesible y Fácil de Integrar
Aunque avanzar en el ritmo de caminata puede ofrecer un «leve beneficio adicional», la doctora Almodóvar ha expresado que lo «realmente importante» es la cantidad de pasos acumulados a lo largo del día o de la semana. Caminar es una actividad accesible y fácil de integrar en la rutina diaria, lo que la convierte en una opción ideal para mejorar la salud de los pacientes con enfermedades reumáticas.
Documento del Proyecto Reumafit
En el marco del proyecto Reumafit, la Sociedad Española de Reumatología (SER) ha elaborado un documento centrado en los beneficios de caminar para las personas con enfermedades reumáticas autoinmunes sistémicas, como pueden ser el lupus eritematoso sistémico, la esclerosis sistémica o esclerodermia, las miopatías inflamatorias, la enfermedad de Sjögren, las vasculitis o las artritis inflamatorias, que suponen un desafío «significativo» al asociarse con la cronicidad y el dolor, la rigidez, la fatiga e incluso la discapacidad funcional.
Mejora de la Pronóstico y Calidad de Vida
Este texto busca reducir el sedentarismo en este tipo de pacientes, animándoles a caminar para tratar sus limitaciones en las actividades cotidianas y mejorar su pronóstico y calidad de vida. «Introducir cualquier actividad física en la vida diaria de los pacientes hará que disminuyan sus limitaciones en las actividades cotidianas y hará que mejore su pronóstico y su calidad de vida», ha matizado la doctora Almodóvar.
Complementar con Estrategias no Farmacológicas
A pesar de los avances significativos en los tratamientos farmacológicos, la experta ha recalcado que es esencial complementarlos con estrategias no farmacológicas que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los pacientes. Caminar es una de esas estrategias que puede proporcionar numerosos beneficios sin presentar riesgos significativos.
Conclusión
La doctora Almodóvar ha insistido en que caminar proporciona numerosos beneficios sin presentar riesgos significativos, disminuyendo el riesgo de presentar «un gran número de enfermedades» y mejorando la «evolución» de la mayor parte de patologías crónicas. Por lo tanto, es una actividad altamente recomendable para las personas con enfermedades reumáticas.
