Juan 3:16 es un versículo clave en la Biblia que resume el amor de Dios por la humanidad y el camino hacia la salvación. Este pasaje, parte del Evangelio de Juan, se encuentra en una conversación entre Jesús y Nicodemo, un fariseo que buscaba comprender el reino de Dios.
Amor Divino: El amor de Dios es inmenso y abarca a todas las personas sin excepción. La frase «de tal manera amó Dios al mundo» subraya la magnitud de este amor, que no tiene límites ni condiciones.
El Sacrificio de Jesús: La entrega de su Hijo unigénito es el acto supremo de amor de Dios. Este sacrificio, realizado en la cruz, es la máxima expresión del compromiso divino con nuestra redención.
Promesa de Salvación: La promesa de vida eterna se ofrece a todos aquellos que creen en Jesús. La fe en Él es el camino hacia la salvación y la vida eterna, una invitación a confiar en el amor y el sacrificio de Dios.
Invitación a la Fe: Este versículo nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con Dios y la importancia de la fe en Jesús. Es un llamado a confiar en el amor redentor de Dios para nuestra salvación.
