OpenKylin se postula como la alternativa china y open source para los AI PCs sin Windows.
El objetivo de este sistema operativo es reducir la dependencia que China tiene del software extranjero.
Microsoft quiere convertir Windows 11 en el sistema operativo para los ordenadores con inteligencia artificial. Bajo el paraguas de Copilot, la empresa de Redmond aspira a consolidar el término “AI PC” para referirse a aquellos dispositivos optimizados para ejecutar modelos de IA (o algunos, al menos) en local. Eso, hasta ahora, era cosa de Windows, pero China acaba de salir al terreno de juego con su propia propuesta de sistema operativo para AI PCs.
Su nombre: OpenKylin para AI PC.
¿Qué es un AI PC? Mejor empezar por el principio. ¿De qué hablamos cuando hablamos de un AI PC? De acuerdo a Intel, Microsoft exige que el ordenador incorpore una CPU, una NPU (Unidad de Procesamiento Neuronal) y una GPU compatibles. Además, el dispositivo ha de contar con la nueva tecla Copilot (¡faltaría!). Si se cumplen esos requisitos, entonces el PC es algo más, es un AI PC, término que seguramente veamos muchísimo a lo largo de los próximos meses y años.
Un nuevo-viejo conocido. La cosa es que si el PC debe tener una tecla de Copilot que lance el asistente de IA de Microsoft este debe tener necesariamente Windows 11. En pocas palabras: no hay AI PC si no es con Windows. De hecho, si nos ponemos quisquillosos, un dispositivo solo puede pertenecer a la categoría AI PC que Microsoft define como Copilot+ PC si tiene un procesador Snapdragon X de Qualcomm, ya que es el único con una NPU de 45 TOPS.
China, calienta que sales. ¿Puede haber AI PC sin Windows? Pues sí, puede. Puede gracias a OpenKylin, el sistema operativo open source desarrollado en China. Este SO no es nuevo (lleva ya un tiempo en el mercado), pero sí lo es el hecho de que ahora está preparado para darle vida a los AI PC.
Según sus desarrolladores, OpenKylin para AI PCs dispone de “una serie de funciones inteligentes como el asistente de inteligencia artificial, el mapa de texto inteligente, la búsqueda difusa inteligente, etc.”. En palabras de los desarrolladores, gracias a la “la profunda integración de hardware y software, los usuarios pueden ejecutar tareas complejas de IA de forma local e independiente sin depender de los recursos de computación en nube, cambiando y remodelando fundamentalmente la experiencia del usuario”.
OpenKylin. Este sistema lo conocimos el año pasado. Se trata de un sistema operativo de código abierto que ha sido creado por una comunidad de 4.000 desarrolladores (y duramente criticado por parecerse demasiado, demasiado a Ubuntu). En China ya se usa en varios sectores porque, de una forma u otra, el objetivo del mismo es reducir la dependencia del software estadounidense. La cosa es que no termina de despegar: solo lo usan poco más de un millón de personas, una gota de polvo en un país con 1.400 millones de habitantes.
Descarga. El sistema operativo está basado en Linux y la ISO se puede descargar desde su web. Es compatible con procesadores x86, ARM y RISC-V, aunque en el momento de escribir estas líneas la versión para AI PCs no parece estar disponible. Es más, no sabemos exactamente qué es un AI PC para OpenKylin, porque para Intel es una cosa y para Microsoft otra.
Lo que sí sabemos es que no hay fabricantes chinos de procesadores, como Loongson, que integren NPUs en sus chips, aunque será cuestión de tiempo. En cualquier caso, este es un pequeño paso más por parte del gigante asiático en su misión de deshacerse de la tecnología extranjera. Es, de hecho, un paso hacia el objetivo real: no depender de tecnología open source, sino usar tecnología propia.
Jose García