Estos asesinatos subrayan cuán superada está la policía en Haití y la ira de los haitianos tras varios meses de asesinatos.
Dos hombres fueron asesinados a machetazos en Haití por una turba que creyó que iban a comprar municiones o armas para las pandillas que han aterrorizado al país, informó el sábado la policía.
Las autoridades confirmaron que la turba arrebató a los hombres a la policía tras haber sido hallados con cerca de 20,000 dólares y el equivalente a unos 43,000 dólares en moneda haitiana en su auto, junto con dos pistolas y una caja de municiones.
El hecho de llevar esa cantidad de dinero fue considerado sospechoso, y los residentes supusieron que se trataba de una compra de armas para las pandillas.
Los asesinatos ocurrieron el viernes en un poblado cerca de la ciudad provincial de Mirebalais. Al parecer, la policía disparó al aire para tratar de evitar los asesinatos, pero, aun así, la turba mató a los hombres. Una de las víctimas era un agente de policía y la otra era un antiguo guardia, de acuerdo con sus documentos de identificación.
Estos asesinatos subrayan cuán superada está la policía en Haití y la ira de los haitianos tras varios meses de asesinatos, secuestros y ataques armados realizados por las pandillas de ese país.
En el último mes, las pandillas han atacado infraestructura clave de la capital, Puerto Príncipe, como estaciones de policía, el principal aeropuerto internacional, que sigue cerrado, y las dos mayores prisiones de Haití, liberando a más de 4,000 reclusos.
El jueves, William O´Neill, experto de la ONU en derechos humanos para Haití, dijo que la nación caribeña, asolada por el conflicto, necesita ahora entre 4,000 y 5,000 policías internacionales para afrontar la «catastrófica» violencia de pandillas, dirigida hacia personas clave y hospitales, escuelas, bancos y otras instituciones fundamentales.
En 2023, el número de víctimas directas de la violencia de pandillas aumentó de forma significativa, con 4,451 personas asesinadas y 1,668 lesionadas, se lee en el informe de O´Neill. Este año, hasta el 22 de marzo, las cifras seguían aumentando, con 1,554 muertos y 826 heridos.
Como resultado de la escalada de violencia de las pandillas, las llamadas «brigadas de autodefensa» han tomado justicia por su propia mano, según el informe, y «se denunciaron al menos 528 casos de linchamientos en 2023 y otros 59 en 2024».
AP