sábado 14 de diciembre de 2024 00:52 am
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Un grupo de trabajadores inmigrantes, con larga presencia en la Gran Manzana, temen que la promesa del camino a la ciudadanía a más de 10 millones de indocumentados sea borrada por completo, por una crisis que prioriza a los recién llegados.

Alas puertas de la oficina en Manhattan del líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, bajo una lluvia pertinaz, un grupo de inmigrantes mayoritariamente de México y Ecuador, elevaron nuevamente pancartas por una petición que no es nueva, pero que como muchos subrayaron, ha sido totalmente olvidada por las organizaciones comunitarias y los líderes electos: !Una reforma migratoria justa!.

“Ya Nueva York tiene inmigrantes incluso con más de 30 años aquí que están muriendo, solo han trabajado honestamente y cumplido con todas sus obligaciones. Y no han visto ningún alivio que les permita siquiera regresar a sus países. Hoy le estamos dejando con mucho respeto, directamente una nota al congresista que nos representa. Pues aquí, todos se olvidaron de nosotros”, exclamó la mexicana, Esther Sánchez, con 25 años trabajando en la Gran Manzana.

Esta acción surgió de una convocatoria espontánea entre vecinos de Brooklyn y Queens, con larga presencia en Nueva York, que en su mayoría formaban parte de organizaciones de apoyo a los inmigrantes que hacen vida en la Gran Manzana. 

Aclararon que detrás de su “modesta” movilización de este martes, no existe ninguna agenda político-partidista oculta.

“Participamos en cientos de marchas para exigir una reforma migratoria y de la noche a la mañana todo se apagó. Pues, surgieron otras prioridades. La nuestra es la misma, seguir nuestra petición a Washington”, destacó la mexicana Adriana Ariza.

“Nada en contra los nuevos”

El grupo de manifestantes dejó claro que no tienen nada en contra de los beneficios que están recibiendo en los últimos meses, miles de inmigrantes recién llegados a Nueva York, en el contexto de una crisis, que se encendió en la primavera de 2022.

A la fecha, más de 110,000 personas han sido albergadas en el sistema de refugios y hoteles de emergencia, habilitados por la Ciudad.

A la par, la semana pasada, la Casa Blanca aprobó el Estatus de Protección Temporal (TPS) por 18 meses para los ciudadanos de Venezuela, lo cual como ha sucedido con otros países de Centroamérica, les permite solicitar un Documento de Autorización de Empleo (EAD). Además la Gobernación y la Ciudad, anuncia acciones de apoyo para poner el acelerador con apoyo jurídico a quienes apliquen a este amparo.

También asambleístas de Nueva York han propuesto permisos de trabajo estatales de emergencia para que los solicitantes de asilo, a los 45 días de haber formalizado su petición, puedan integrarse más rápidamente a la economía local y dejar de depender de los programas sociales y los refugios.

“Hay otros intereses, que no conocemos bien en este momento. Pero somos una fuerza que nunca hemos tenido excusas para salir a trabajar. Y jamás hemos dejado de pagar nuestros impuestos. Por eso exigimos. Porque hemos cumplido. Es tiempo que se recuerde la promesa de una reforma migratoria equitativa para más de 10 millones de indocumentados”, reiteró Adriana.

¡!Cuenten bien!

El grupo de trabajadores inmigrantes calculó que desde mayo de 2022, varios activistas de Nueva York y líderes electos, sacaron por completo de sus prioridades mencionar siquiera la necesidad de una reforma migratoria.

“Parecemos pocos aquí, pero somos millones. Siempre hemos sido una ficha en el juego político que ahora la parecer no es necesaria. Por lo menos requerimos la voluntad de nuestros representantes en el Congreso. !Cuenten bien! Quizás muchos no pueden votar, porque no tienen papeles, pero sus hijos y sus nietos sí”, aseveró la mexicana Bárbara López.

Propuestas bloqueadas

Por su parte, Hildalyn Colón, portavoz de New Immigrant Community Empowerment (NICE), una de las organizaciones que han sido punta de lanza para presionar por una reforma migratoria, reflexionó que se debe comprender que el camino a esta posibilidad es largo, y no ha sido olvidado.

“Lo importante es que se entienda que hay nuevos escenarios, que requieren una respuesta estratégica distinta. Y lo vital es que las nuevas circunstancias no nos dividan. Que los nuevos retos no nos encuentren separados como comunidad hispana. Nueva York seguirá dando ejemplos de lucha a favor de todos sus inmigrantes”, destacó.

Desde su primer día en la Casa Blanca, el Presidente Joe Biden, entregó una propuesta de reforma migratoria que busca dar un camino a la ciudadanía a casi 11 millones de indocumentados, la cual ha quedado bloqueada en discusiones bipartidistas.

En este momento, de acuerdo con varios analistas políticos, la propuesta del mandatario nacional y otras iniciativas bipartidistas, en esta misma dirección, están totalmente bloqueadas en el Congreso.

Ante la presión migratoria que vive la frontera con México, esta semana el senador estatal demócrata de Massachussets, Marc Pacheco, encabezó una carta al Congreso, que sostiene que se necesita urgentemente una reforma migratoria integral para abordar un sistema de entrada disfuncional y una escasez de fuerza laboral que “rápidamente evoluciona”.

“La última vez que adoptamos una legislación de inmigración legal fue antes a la caída de la Unión Soviética y el auge de Internet. El mundo es hoy un lugar completamente diferente. Necesitamos un sistema de inmigración que permita a Estados Unidos enfrentar los desafíos del resto de este siglo XXI”.

  • 477,000 indocumentados vivían en la ciudad de Nueva York en 2019, con base a la última proyección conocida publicada por la Ciudad. Pero en los últimos años esta cifra pudo haber crecido en 50%.

Por  Fernando Martínez

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