sábado 23 de noviembre de 2024 09:39 am
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La familia de un hispano de 45 años que murió apuñalado en una pelea en un bar en Queens (NYC) presentó una demanda alegando que el camarero siguió sirviendo alcohol al cliente borracho que luego fue acusado del homicidio.

Una pelea mortal en un bar en Queens (NYC) se salió de control en parte porque el camarero siguió sirviendo alcohol a un cliente borracho que luego fue acusado de apuñalar fatalmente a un hombre en la cabeza, alega una demanda presentada por la familia de la víctima.

Elliott Ortiz tenía 45 años y fue apuñalado repetidamente en una sangrienta pelea en septiembre de 2023 en el Kelly’s Pub de Flushing. Ahora su familia afirma que el bar “imprudente y negligentemente” siguió sirviendo alcohol a Jason Schuler, quien fue arrestado y acusado de homicidio después de que el hispano fue encontrado inconsciente con una puñalada en la cabeza en la puerta del establecimiento.

El sospechoso de 40 años también fue apuñalado seis veces por la espalda, pero sobrevivió, recordó New York Post.

Según la familia, los trabajadores siguieron dándole alcohol a Schuler, incluso después de que estaba borracho, según la demanda presentada el 27 de junio en la Corte Suprema de Queens contra los propietarios del bar, WWMD Corp.

La familia Ortiz también afirma que el bar no tenía la seguridad adecuada. La víctima vivía a cuatro cuadras del establecimiento y no hizo nada para provocar la violencia, según documentos judiciales.

Sus allegados lo recuerdan como un “gran trabajador” y siempre dispuesto a ayudar a los demás, según un obituario. “Siempre fue el alma de la fiesta con su risa contagiosa… no hace falta decir que nunca era un momento aburrido cuando él estaba cerca”.

Schuler, quien se declaró “no culpable”, se encuentra detenido sin derecho a fianza y deberá comparecer ante el tribunal a finales de este mes. Los dueños demandados no han emitido comentarios. Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.

En un caso similar, en abril Maurice Hartridge, portero de un bar de Brooklyn (NYC), fue arrestado como sospechoso de matar a puñaladas al cliente Daryl Dawkins (37), quien estaba de visita en la ciudad, dejando cuatro niños huérfanos, incluyendo un bebé por nacer.

En febrero un mexicano murió apuñalado en una pelea grupal en un bar en El Bronx (NYC). Ese mismo fin de semana un hombre de 31 años fue fatalmente acuchillado en un bar en Nueva Jersey y cinco hispanos fueron identificados como sospechosos.

En general en la ciudad de Nueva York son comunes los apuñalamientos y cortes. Hubo 4,493 casos en 2023 hasta principios de diciembre, un aumento de 6% frente al mismo período de 2022. En paralelo los arrestos por delitos de arma blanca aumentaron casi 30%.

Un reporte previo de NYPD alertó en agosto pasado que los apuñalamientos mortales habían subido 29% ese año en la ciudad en comparación con antes de la pandemia (2019). Los ataques con armas blancas se han vuelto más frecuentes en diversos escenarios: calles, edificios, hogares, buses, Metro, fiestas, escuelas y hasta establecimientos comerciales y zonas de cajeros automáticos ATM.

El Diario

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